Blisset se sustraía a la integración sistémica, comprendía que el capital es un parásito que succiona todo lo humano que hay en ti. El juego de fútbol era práctica de interacción, comunicación, inteligencia y conocimiento, que él veía orientarse hacia la valorización de la mercancía.
Fue entonces cuando decidió no ser una interfaz de ese mecanismo; decidió interrumpir la comunicación,
ser un cortocircuito viviente.
(continuará...)
1 comentario:
esto se esta poniendo interesante...
esa foto es como una de tu fotolog
por que no lo seguiste a eso?
besos grandes w
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